Feliz salida y entrada de año 2009.
martes, 30 de diciembre de 2008
Centollo
Feliz salida y entrada de año 2009.
lunes, 29 de diciembre de 2008
Why?
And you sayWhy?
Don't ask me why I don't love you anymore
I don't think I ever did
And if you ever had
Any kind of love for me
You kept it all so well hid...
And you say why?
Gracias
Probablemente la respuesta a la pregunta es que soy una inconsciente que da gracias a Dios por echarme una mano cuando más lo necesito.
domingo, 28 de diciembre de 2008
Bancos
-¿Pero como puede ser posible? yo tengo lingotes de oro y tengo acciones en las mejores y más prestigiosas compañías, y una pensión vitalicia fruto de años de inversión con esfuerzo y constancia...
-Un día. Y mañana me destinan a otra.
-Y el Sr. Jaradins donde está ahora?
-No se de quien me habla
-Del Anterior Director, con el que yo traté todos mis asuntos.
lunes, 24 de noviembre de 2008
Despidiendo el 2008
Tengo bastantes ganas.
lunes, 10 de noviembre de 2008
No lo era
Supo que había llegado tarde. Se fue pensativa arrastrando su maleta.
Pero sintió que no habría llegado a tiempo nunca.
No era su tren.
martes, 28 de octubre de 2008
Ch
Solo comía chorizo, chistorra, chuletitas y chirlas. A veces se lanzaba y pedía chalchichas. Le entendían. De dulce no perdonaba unos churros con chocolate caliente. Y de fruta sus chirimoyas.
Vivía en un chalet con chimenea en Chamberí.
Su bebida favorita era el champán.
Viajaba a China y a Chechenia. A veces también se dejaba caer por Checoslovaquia pero desde que se quedo en la República Checa dejó de hacerlo.
Su novia se llamaba Charo y sólo sabía hablar con la Z.
Imagínense el resto.
Humo II
-Creo que vas a tener que salir de nuevo a por tabaco.
Y cerró la ventana.
lunes, 27 de octubre de 2008
Lujo
Tenemos todos el corazón dormido. El solitario, el mal acompañado y el que no sabe lo que tiene.
Pero siempre podremos compensarlo yendo de compras, huyendo a una isla paradisiaca o dándonos un masaje.
miércoles, 22 de octubre de 2008
lunes, 20 de octubre de 2008
Humo
Después de tiempo sin saber de él apareció como si nadie le hubiese echado de menos.
Como si siempre hubiese estado ahí.
Apenas se esforzó en contar nada.
Ignoró el intercambio de miradas de los demás. Los signos de interrogación se podían ver en tres dimensiones, pero él ni se inmutó.
Sacó un cigarro y pidió fuego. Mientras se inclinaba sobre él con la cerilla, ella le preguntó ya directamente:
¿donde demonios te has metido estos años?
Pues si te lo dije, fui a por tabaco -contestó él-
lunes, 6 de octubre de 2008
¿Esto es todo?
He notado que mi memoria empieza a estar llena y elimina aleatoriamente fastidiándome en muchos casos. Tengo muchas más dudas y errores ortográficos. Olvido los nombres de películas y actores. Gente y hechos de mi vida. Es posible que esto me ocurriese hace ya tiempo pero ahora soy más consciente. Es cierto que hace ya una década me compre pastillas para la memoria y nunca las tomé porque me olvidaba de hacerlo. También es cierto que me compré una agenda y o me olvidaba de apuntar las cosas o de mirar posteriormente las anotaciones.
Pero acabo de cumplir 40 años. Y empiezo a repasarme. Mi madre se hace auditorías a si misma. Yo me repaso (suena fatal. Me repaso mentalmente). Y en esas estoy cuando noto lo de la memoria. También tengo más arrugas. Y me he cansado al subir las escaleras. La gente me aburre bastante. Yo por tanto debo aburrirles a ellos. Cocino más, limpio menos, observo más, actúo menos. ¿Desde cuando? ni me acuerdo...
Nada nuevo.
¿Y esto es todo?
Parece ser que a partir de los 40 la vida se ve diferente y que yo no aparento la edad que tengo. Esto son los consuelos que me han dado mis amigos junto con la felicitación de cumpleaños. Eso espero. La visión del mundo cambia, te encuentras más relajado, menos metas que cumplir, menos que demostrar. Eso está pero que muy bien. Tiene doble lectura, la optimista es esa tranquilidad. La pesimista es que esto es así porque poco más puedes hacer, hasta aquí has dado de sí. Pero yo no estoy del todo de acuerdo, probablemente porque siempre he pensado que paso por la vida con un retraso de cinco años. Ahora siento lo que otros con 35, y creo que aun tengo millones de cosas que hacer, mucho que demostrar, un futuro inquietante a partir de que cierre este escrito. O de la próxima línea.
¿Que será, será?
Sospecho que me haré rica. Más que sospecha me lo ha dicho mi astrólogo preferido, y yo le creo.
Sospecho que el hombre de mi vida está esperando a que tire definitivamente la toalla para venir a recogerla y traérmela envuelta en papel celofán.
Sospecho que dejaré de trabajar (derivado de mi primera sospecha) y viajaré por todo el mundo en un velero de madera.
Y sospecho que sonará el despertador.
O no.
El
La medida de lo que importa y de lo que no es inexistente.
Abre la puerta y trata de hacer corriente, que el aire se renueve y las ideas también. Intenta mantener el equilibrio entre esa realidad y la otra. La que le enseña el lado de colores, la que le ayuda a ayudar, la que le deja vivir, hacer y deshacer. Y soñar.
A veces entorna la puerta, sigue abierta pero solo deja pasar a los huéspedes que quiere. Vive en la realidad pero tiene tantas caras que salta de una a otra en segundos.
Abierta y de frente. Abierta y de soslayo. Incluso curiosea por la mirilla, unas veces está todo oscuro y otras alguien ha encendido la luz.
domingo, 21 de septiembre de 2008
jueves, 11 de septiembre de 2008
Propósitos
Y me gusta así.
El ajuar.
Me encantan las casas sin orden ni concierto.
Yo nunca he tenido ajuar. Será que mi madre ya me veía venir.
Apenas una semana incorporada de las vacaciones y ya las siento tan lejanas. De nuevo hago mi lista mental de nuevos propósitos para el curso. Absurdo, lo se, sobretodo porque luego se me olvidan y no sirve para nada, pero...
Este año hay uno prioritario: búsqueda de la belleza.
En mi vuelta a la realidad (mientras viajo me siento ajena a todo) he querido ponerme al día de los acontecimientos ocurridos en mi ausencia. Veo con gran decepción la manera de tratar los medios el accidente aéreo. Deprimente y asqueroso. Qué espanto ver como se discute mezquinamente mientras aun están intentando identificar los cuerpos. Qué lamentable ver también a una mujer, que fue defendida de un maltrato, sacar partido a costa de su defensor en coma y estar en la tele cobrando por ser una basura sin conciencia ni respeto. Me ha servido estar desconectada un mes, fuera de la influencia de los medios, para darme cuenta de lo bajo y cutre que estamos cayendo.
En fin y en resumen, yo no quiero esto.
Chapuzas
El huevero es un señor que tiene una pollería debajo de mi despacho y que arregla los desaguisados que tengo. Una persona muy original, muy sencilla y absolutamente encantadora.
Lleva toda la vida haciéndolo, antes en casa de mis padres, que vivían cerca, y ahora aquí.
Ayer estuvo aquí. Llegó tarareando la bienpagá.
A mi me llama moza.
martes, 29 de julio de 2008
Eterna Libra
Siempre quiero lo que no debo. Siempre me apetece estar en el sitio que no estoy. Estar con la persona que ese día no está. Comer el plato que no he pedido. Ir en coche a donde voy andando y viceversa. Tener gatos que me dan alergia. Salir de copas cuando me quedo en casa. Volver a casa cuando estoy por ahí. Echo de menos la rutina cuando estoy desordenada y liarme la manta a la cabeza cuando estoy tranquila, el zumo de tomate cuando no tengo y cuando lo compro nunca me apetece...
Eterna insatisfecha, eterna contradicción, eternas dudas, eterna libra.
miércoles, 9 de julio de 2008
Sensaciones
Otros tiempos
En un tiempo estuvo hinchado y con los colores brillantes. El cuero duro y con sus cosidos impecables. Ahora habitaba en una esquina del jardín, llevaba allí más de 30 años.
Sus propietarios habían jugado con él pero llegó un momento en que crecieron y se olvidaron de hacerlo. En varias ocasiones corrió el riesgo de terminar de un cubo de basura pero se salvó.
Para sus dueños simbolizaba su infancia. Existía una lealtad hacia el viejo balón sin necesidad de que botase ni de que tan siquiera rodase. Formaba parte de su casa.
Y el balón aguantó.
Primero estuvo muy triste, nadie se acordaba de él. Había vivido una época de esplendor (en la hierba) cuando los balones eran lo que eran y los niños valoraban los juguetes que tenían. Era el rey.
Más tarde intentó pasar desapercibido, se hizo su hueco en una esquina e intentó estar alerta para no ser despreciado definitivamente por sus dueños o por el jardinero que odiaba que hubiese extras en "su" jardín. Lo consiguió.
Y ya en su vejez infinita está agradecido. Sabe que no fue el azar lo que le permitió vivir en sus vacaciones indefinidas, sino el cariño de su familia. Cada verano le dan unas pataditas, hablan de él, los gatos lo huelen, lo intentan mover, se duermen a su lado.
El jardinero lo respeta, los pájaros también, los gatos lo aprecian y vive tranquilo con su jubilación garantizada junto con su dueño en igual situación. Años de gloria, años de retiro.
Eran otros tiempos en los que las cosas perduraban más. Con o sin utilidad. Con o sin diseño. Sabe que de haber nacido ahora habría durado un par de meses.
Pero lo que más le satisface es que nunca fue sustituido. Nunca hubo otro balón ocupando su lugar. El tiempo le situó y sigue siendo el rey.
martes, 1 de julio de 2008
Duendes
Se que es una comparación absurda, no somos máquinas. Cualquier persona-impresora habría saltado al primer insulto mío - vaya mierda de impresora que tengo, siempre me tiene que fallar cuando más falta me hace, inútil- y me habría empezado a echar la culpa a mí -inútil tú, que ni distingues la tinta de color de la de negro, hablas con máquinas, estás loca- habríamos discutido y jamás me habría parado a observar tranquilamente cual era el verdadero problema.
Yo no suelo discutir demasiado en cuestiones amorosas. Probable error.
Si la relación va bien no concedo demasiada importancia a las cuestiones chirriantes como para discutir por ellas. Estoy contenta y acepto el pack.
Creo que nadie cambia, que si me va bien así, vale, si no, antes o después terminará, haga lo que haga yo por ello. En lugar de discutir voy marchitándome viendo con pena lo inevitable: que por mucho que se intente hay relaciones abocadas al fracaso, incompatibles a largo plazo y no hay quien sostenga eso. Y terminan.
Y pasa el tiempo.
Y este post se llama los duendes por otro motivo. El despacho que tengo es heredado. Mi padre trabajaba aquí. De vez en cuando le oía gritar ¡los putos duendes! eran momentos de desesperación, le habían desaparecido los papeles que apenas un minuto antes tenía delante o bien la impresora no funcionaba (de ahí este escrito) o su pluma descargaba toda la tinta sobre el escrito de turno acabando en un segundo con trabajo de horas. Los duendes hacían de las suyas. A mi me hacía mucha gracia que una persona tan seria y tan lógica creyese en duendes a esas alturas de su vida. Alucinante. Intentaba ayudarle pero la risa no me dejaba y se cabreaba aun más.
Solo el tiempo y habitar el mismo despacho me ha llevado a la conclusión de que los duendes existen. Siguen aquí haciendo de las suyas. Me quitan la luz justo el día en que tengo un texto recientito y que no he tenido el cuidado de salvar...me traspapelan documentos, hacen que justo cuando viene un cliente "importante" cruce una cucaracha parsimoniosamente y solo la vea yo mientras intento distraer al susodicho para que no se gire y piense que esto es decadente. Cucaracha que no había aparecido en dos años, la muy...
Son becarios caóticos, no les pago, no les alimento pero les compensa estar por aquí reivindicando su existencia, el recuerdo de mi padre y mi cruda realidad de escribiente despistada.
lunes, 23 de junio de 2008
Cafeína por favor
lunes, 5 de mayo de 2008
Hay dolores que matan
martes, 25 de marzo de 2008
Oda a la limpieza
Últimamente cuando tengo ganas de llamarte me controlo. He encontrado un método que es eficaz. Me pongo a limpiar.
La moqueta, las ventanas y los espejos hoy están relucientes.