lunes, 24 de noviembre de 2008

Despidiendo el 2008

Resulta que estoy aquí sentada esperando a que el año 2008 se termine de una vez.

Tengo bastantes ganas.

Aunque no entiendo lo más mínimo me han llegado ecos de que los planetas nos están jodiendo. A mí en concreto y a la humanidad en general.

Comentando este pensamiento tan contrastado resulta que hay quien mantiene que en poco tiempo nos vamos a la mierda, gracias a estos mismos planetas. Yo me he imaginado un choque de intereses planetarios y booom, todos nos volatilizamos y nos convertimos en la nada.

Yo no lo creo, no me han dado datos lo suficientemente convincentes (y no hace falta mucho para que a mi se me vaya la olla y dedique su tiempo a pensar en estas cosas). Lo único que quiero es cambiar de año, que sea impar y de color pruna. Otro año, otros movimientos planetarios, otros gobiernos, otras vibraciones, otros intereses, otros...

Resulta que he decidido levantarme y esperar a este final de otra manera, porque no creo que valga la pena estar quieto, lo que no haga yo no lo hará nadie por mí. No hay que esperar nada de nadie. Nada.

lunes, 10 de noviembre de 2008

No lo era


Supo que había llegado tarde. Se fue pensativa arrastrando su maleta.
Pero sintió que no habría llegado a tiempo nunca.
No era su tren.