tengo que viajar a Marte
Hacer trescientos años de terapia
Y decidir, dejar que pase el mes de abril
Juntar todas las hojas del otoño
Dicen que para olvidarte hay que tener en el bolsillo
Un almanaque sin domingos, un crucero
Y navegar en un océano sin mar
Tomarse todo el agua de la lluvia
(Tan Bionica."La suerte está Echada")
Y resulta que hay un día en que te das cuenta en que todo eso ya lo has hecho y estás curado. Ya olvidas o, mejor dicho, pasas a tener sólo recuerdos. Dejas de tener ese presente vacío que quieres volver a llenar como sea, aunque sea a golpe de pasado.
Y lo notas...
Lo notas. Te sientes liberado, ligero y contento. La pena pasa a ser parte de esa historia y queda archivada, guardada, ya sin ese dolor. Hay un click y tienes que oírlo.
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